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martes, 17 de marzo de 2015

Ludwig van Beethoven (1770 - 1827)




Ludwig van Beethoven nació en Bonn en 1770 en el seno de una familia de músicos de origen flamenco. El primer maestro que tuvo influencia sobre Beethoven fue Neefe, compositor de canciones y óperas. Con él descubrió El clavecín bien temperado de Bach, al tiempo que trabajaba la composición. Pronto el joven Beethoven sintió la fiebre de conocer y de entrar en contacto con la cultura literaria y filosófica, leyendo a los clásicos griegos y latinos, a Shakespeare, Klopstock, Goethe, Schiller, Kant, etc. A partir de 1784 toca en la orquesta del príncipe elector. En 1787 visita Viena donde recibe lecciones de Mozart; más tarde, en 1792, regresa a esta ciudad para establecerse y estudiar con dos afamados músicos, Joseph Haydn y Albrechtsberger. En 1795 hace su presentación pública como pianista. En 1800 estrena la Primera Sinfonía. En 1802 intenta suicidarse y redacta el llamado "Testamento de Heiligenstadt". A partir de 1804 su estilo se afirma y se personaliza. Permanece soltero tras varias contrariedades amorosas. Desde 1801 le aqueja una sordera progresiva, que marca su vida con un sello trágico. A partir de 1818 ésta es total. Beethoven se aisla en la actividad creadora, logrando algunas de las páginas cumbres de la historia de la música. Muere en Viena en 1827. A sus funerales asistieron miles de personas y se celebraron actos de homenaje póstumos.

Beethoven representa una doble encrucijada. Por una parte en su obra se da una dualidad de estilos: es el último clásico que hereda el espíritu de Mozart y Haydn, y también es el primer músico de una personalidad netamente romántica. Por otra parte, Beethoven es la primera figura que puede manifestar toda su personalidad y su temperamento artístico de una manera completamente libre, sin compromisos serviles.

Beethoven parte de las formas clásicas del siglo XVIII, aprovechando sus sólidas estructuras para después violentarlas bajo exigencias expresivas muy personales, descubriendo nuevas vías idiomáticas y extendiendo los recursos y medios técnicos en variedad y riqueza. En su producción se distinguen tres estilos básicos. Un primer estilo aún muy dependiente del pasado, cercano a la sensibilidad del siglo XVIII. Un segundo estilo de búsqueda de un lenguaje personal con el que expresar su vida interior. Y un tercer estilo que sustituye el lenguaje de la pasión por el de la reflexión.